Mis hijos crecen, bueno ahora mas que crecer, digamos que se hacen mayores. Disfruto de ellos una barbaridad, pues puedo decir con satisfacción que tengo dos hijos que me llenan de orgullo. Si, soy una madre feliz y que además tengo el convencimiento que ellos también disfrutan de nosotros. Los hemos educado lo mejor que hemos sabido y creo que el resultado no ha estado mal, pues aún siendo bien distintos, solo nos dan satisfacciones y eso hoy en día no es tan fácil.
Lo bonito de todo esto es que nos enriquecemos todos mutuamente, ya que cada uno aporta lo suyo y todos lo aprovechamos.
Sabéis? ahora que se hacen mayores es cuando mas pienso en cuando eran pequeños y en esos maravillosos años, como me gustaría volver a repetir la historia y pienso que seguiría haciéndolo igual. No la cambiaría ni un ápice. Fue una etapa maravillosa, que ahora viendo a mis sobrin@s con sus hijos pequeños me hace enternecer. Dios, que blanda me vuelvo......
Que por que me ha dado por aquí, pues porque este Angel Food Cake se lo he hecho para mi hijo "pequeño" que el otro día hizo 38 años. Dios, como pasa el tiempo!!!!!
El hacerles un pastel de cumpleaños, se ha cumplido a rajatabla durante toda la vida. Y claro, siempre ha de ser algo que a ellos les guste, por algo es su día.